Zabalortu en la actualidad ha desarrollado tres aspectos principales de su proyecto:
a) ha acondicionado la parcela y utensilios precisos de los huertos,
b) adjudicado los usos de cada uno y
c) ha implicado a estos vecinos/as para que la autogestión sea una formula participada y comunitaria mediante comisiones de informática, actividades, ornato, formación, etc.
De esta forma, se han realizado trabajos que implican a las personas y además ofrecen actividades socio cultural al barrio, de tal forma que han transcurrido varios meses de gestión con resultado destacable de implicación de personas y colectivo, así como visión social y comunitaria, actividades de gran potencialidad.
En resumen, se han aprovechado los espacios, parcelas y más de cincuenta huertas mediante la siembra, cuidados y recolección de alimentos, dentro de la temporada (mayo a octubre) así como presentaciones, fiestas, cursos, talleres infantiles y para adultos, charlas, etc.
También se han realizado otras actividades por parte de otros colectivos rentabilizando el espacio, capacidad de llamada, iniciativa e implicación de sus componentes.
Por otra parte, ha resultado muy recurrente, llamativo y atractivo para el resto del barrio, para otros barrios y para colectivos o personas de otras zonas, agricultores, promotores de huertos, de otros barrios y formas de cultivo, salud o alimentación, generando relaciones y capacidad de formar y desarrollar actividades lúdico culturales para toda la ciudad.
Junto a dichas potencialidades el grupo promotor a adquirido experiencia contrastada y ha recogido tras debates su ilusión por el desarrollo del proyecto en toda su extensión social, integradora, comunitaria y cultural, pero con las limitaciones actuales tanto por los costes de mantenimiento (luz, agua, aperos) como por las dificultades en las actividades formativas y culturales en cuanto a pago de tasas por ocupación de vía pública, equipos, materiales o difusión.
Dichas limitaciones han cercenado la capacidad de desarrollar el proyecto con mayor ambición, para lo cual se ha desarrollado un debate interno y con otros colectivos, siendo la conclusión que la posible colaboración municipal (vía convenio) podría aprovechar y rentabilizar este potencial.